¿Déja vu de nuevo?
La búsqueda de Aaron Pico para ganar su primera oportunidad en el título de peso pluma de Bellator MMA llegó a un desafortunado final después de que sufrió una dislocación del hombro en la ronda de apertura de su lucha contra Jeremy Kennedy en Bellator 286 en Long Beach, California. La lesión se produjo a mediados del primer asalto, y se pudo ver a Pico intentando colocarlo en su sitio mientras Kennedy lo tenía contra la jaula. Una vez finalizado el asalto, Pico se dirigió a su esquina con el hombro izquierdo colgando. Su entrenador, Brandon Gibson, inmediatamente comenzó a tirar de su hombro tratando de ponerlo en su lugar.
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Pensando que el trabajo estaba hecho, Pico se levantó para salir al segundo asalto. Pero, justo antes de que comenzara la acción, el árbitro llamó a un médico para que evaluara la lesión. Después de examinarlo, el médico y el funcionario de turno mantuvieron una conversación tratando de decidir si le dejaban continuar o no. Mientras tanto, Pico les rogaba que dejaran continuar el combate, lo que retrasó la respuesta final del médico.
Al final, el médico decidió que era demasiado peligroso (y con razón) permitir que Pico -que no podía levantar completamente el hombro- siguiera adelante. La pérdida es devastadora para Pico, que parecía estar a una victoria más de enfrentarse al ganador del evento principal de la noche entre el campeón, Patricio Pitbull, y Adam Borics.
Por ahora, su hombro es su principal preocupación, ya que sin duda se someterá a nuevas pruebas para determinar el alcance de su lesión y ver cuánto tiempo permanece en el banquillo. Esta fue la segunda noche de lucha que se truncó como consecuencia de una lesión.
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