No hay nadie en la historia de la NFL como Lamar Jackson. El primer Michael Vick era igual de dinámico como scrambler, pero da la sensación de que Jackson es el quarterback más escurridizo de la historia de la liga, ya sea usando sus piernas para ganar yardas por tierra, o haciendo que los defensores fallen antes de lanzar un pase. En la Semana 4 contra los poderosos Buffalo Bills, Jackson tuvo una de las escapadas más impresionantes de su carrera.
En un 2º y 19 a mediados del segundo cuarto, los Bills parecían tener a Jackson en el campo trasero con varios defensores sobre él. De alguna manera, Jackson escapó y lanzó un pase que rebotó en Mark Andrews y llegó a las manos de Devin Duvernay. No verás una jugada más ridícula en la Semana 4.
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Lamar Jackson es imposible. Esta jugada debería haber sido detenida al menos tres veces, pero de alguna manera Jackson siempre encuentra la manera de hacer una jugada.
Jackson ya tiene un MVP a su nombre. Está construyendo un caso para su segundo MVP en la primera parte de la temporada de este año. Es un honor y una bendición ver a Lamar jugar al fútbol gracias a jugadas como ésta.
