Han sido unas semanas turbulentas para el United, con las especulaciones sobre el futuro de Ole Gunnar Solskjaer alcanzando un crescendo durante el parón internacional.
El primer partido de Carrick al frente del equipo, una victoria sobre el Villarreal el martes, supuso un cambio en la táctica del noruego, pero al parecer no fue suficiente para tentar a la directiva a arriesgarse con un entrenador no probado.
Rangnick no es ciertamente uno de ellos, y su destreza en varias funciones podría beneficiar a los Diablos Rojos a largo plazo, a pesar de su posible contrato a corto plazo.
Rangnick ha ocupado puestos en la línea de banda y entre bastidores durante una distinguida carrera, y una figura experimentada encabezando su estrategia de contratación podría ser un cambio muy necesario.
En los últimos años, los fichajes del United se han caracterizado por una serie de errores, entre ellos los de Ángel Di María y Alexis Sánchez.
La ventana de transferencias de enero está a la vuelta de la esquina, por lo que puede que no pase mucho tiempo hasta que Rangnick tenga la oportunidad de dejar su huella en la plantilla del United.
El hecho de que el alemán ocupe un puesto entre bastidores será bien recibido por los aficionados, que en las últimas temporadas han pedido a gritos una mayor dirección desde arriba.
Si bien su nombramiento aliviaría al club de la necesidad de contratar a un gerente en la actualidad, tendrán que volver a salir al mercado al final de la temporada.
Aunque esos planes parecen haber quedado en suspenso, el argentino sigue siendo el principal candidato a ocupar el cargo al final de la campaña.
En medio de los rumores de tensión entre Pochettino y la jerarquía del PSG, se cree que el jugador de 49 años está interesado en regresar a la Premier League.
Si estará disponible en el verano está por verse, pero Pochettino en el asiento caliente y Rangnick manejando los hilos detrás de las escenas representa una perspectiva que hace agua la boca para los fieles del United.