El ex campeón de la UFC Conor McGregor fue objeto de críticas a principios de esta semana por sus comentarios incendiarios hacia el locutor de radio y querido comediante irlandés PJ Gallagher, burlándose del nativo de Cork de 47 años por sus problemas de salud mental.
Esos comentarios se produjeron después de que Gallagher se ofreciera por primera vez a dejar que Gran Bretaña se quedara con McGregor cuando la analista de la UFC Laura Sanko etiquetó erróneamente a «Notorious» como luchador británico.
«Pequeña y triste pox de una cosa», escribió McGregor en un tweet borrado desde entonces. «Siéntate y sonríe para variar, triste c*** jajaja tu esposa te dejó y tu (sic) llorando en el periódico por depresión, postura como un langostino (emoji riendo). Triste b******. Soy Irlanda. Hay sangre en mi bandera useesoo».
Gallagher pasó tres meses en los Servicios de Salud Mental de St Patrick, en Dublín, pero aún no se sabe si lloró en la ducha.
El futbolista irlandés Paul McGrath se apresuró a tachar a McGregor de «matón» por su ataque a Gallagher, lo que llevó a «Notorious» a retarles a ambos a un combate de boxeo 2 contra 1 entre famosos a beneficio de organizaciones de salud mental y contra el acoso escolar.
Eso no le sentó nada bien a Desmond Keogh, víctima de un ataque en un pub.
«No tengo ningún interés en tener a McGregor en mi vida, lo he dejado en blanco», dijo Keogh a Dublin Live. «Pero soy un seguidor de Irlanda y decir eso de Paul McGrath, que es una leyenda nacional a mis ojos, es una estupidez. Ésa es mi opinión. ¿Por qué iba a decir eso? Y la salud mental es muy importante. Lo que dijo McGregor sobre eso también fue estúpido. No sé por qué alguien hablaría de la salud mental de otra persona. No hay razón para ello. No eres una persona muy agradable, ¿verdad, si te comportas como McGregor? El hombre [PJ Gallagher] estaba hablando de su salud mental».
Keogh, de 54 años, fue golpeado en el cráneo por un iracundo McGregor tras negarse a envenenarse con un vaso del whisky Proper No. 12 del irlandés, ex campeón de la UFC. Ese ataque no provocado dejó a «Notorious» abierto de par en par a una posible demanda; sin embargo, Keogh se negó a hacer una declaración de impacto y pareció contentarse con la disculpa pública de Mac.
Como era de esperar, Gallagher, McGrath y Keogh tienen prohibida la entrada a la posada Black Forge, previamente incendiada.
