Cuando Estados Unidos e Inglaterra se enfrenten el Viernes Negro, es muy posible que se batan récords de audiencia televisiva. Este Mundial ya está atrayendo a un gran número de telespectadores gracias a la facilidad de acceso a los horarios de los partidos y a la falta de competencia por la audiencia. Más de 8 millones de personas sintonizaron el partido inaugural de la USMNT contra Gales en FOX, el proveedor de televisión en lengua estadounidense de la Copa Mundial. Aunque el horario de su crucial choque del Grupo B contra los Tres Leones seguirá siendo el mismo, las circunstancias son drásticamente diferentes y deberían dar lugar a un espectáculo imperdible.
El partido de la Copa Mundial Masculina más visto en la televisión de habla inglesa es el empate 2-2 entre Estados Unidos y Portugal en la fase de grupos de 2014. Aquel entretenido encuentro atrajo a 18,2 millones de espectadores. Conseguir 10 millones de espectadores más que el partido contra Gales puede parecer improbable, pero si se tiene en cuenta el aspecto inusual de la temporada de vacaciones, tiene muchas posibilidades.
El día después de Acción de Gracias es sinónimo de compras y sobras, y aunque la NFL tiene el monopolio televisivo del jueves, el día después es casi el escenario perfecto para que un partido de fútbol gane audiencia. Si a eso le unimos el hecho de que el partido de la USMNT contra Inglaterra podría hacer realidad o fracasar sus sueños de clasificarse para octavos de final, nos encontramos ante una gran atracción deportiva. Una derrota ante Inglaterra no acabaría del todo con las opciones de Estados Unidos de pasar a octavos de final, pero lo pondría muy difícil. Una victoria, por el contrario, se convertiría en uno de los momentos más importantes de la historia reciente del fútbol estadounidense y le permitiría profundizar en el torneo.
Aparte de las implicaciones a corto plazo, un partido Estados Unidos-Inglaterra en la Copa Mundial tiene un atractivo mucho mayor. Dejando a un lado las evidentes connotaciones políticas e históricas, está el factor prestigio. Todo el mundo tiene un amigo aficionado al fútbol que anima a Inglaterra en los grandes torneos en lugar de a la USMNT porque vio dos partidos del Manchester United en algún momento de su vida. Inglaterra es el equipo más glamuroso para el aficionado ocasional. Si has visto este deporte en algún momento, lo más probable es que te hayas topado con un partido de la Premier League antes que con cualquier otra cosa.
El debate sobre «la mejor liga del mundo» será eterno, pero no hay duda de que la Premier League es a la que el aficionado medio presta más atención. A falta de una descripción mejor, es la liga sexy hacia la que todo el mundo se siente atraído. Así pues, puede que al aficionado al deporte en general no le importen las posibilidades de que la USMNT supere su grupo, pero seguro que prestará atención a Harry Kane, del Tottenham, o a Phil Foden, del Manchester City, cuando jueguen contra los estadounidenses.
Todos estos factores preparan el terreno para lo que debería ser uno de los mayores acontecimientos deportivos del año. Pon a dos buenos equipos frente a frente en medio de una tarde de vacaciones con todo el país frente a sus televisores y podríamos ver cómo se hace historia.
