Justin Fields ha dado pasos impresionantes esta temporada de la NFL como quarterback. Desde lo que ha hecho en el bolsillo como pasador, a lo que ha demostrado con el balón en sus manos, los Chicago Bears tienen todas las razones para creer que puede ser la piedra angular de su ofensiva en los próximos años.
Pero una conversión de tercer down contra los Detroit Lions el domingo ilustra lo crítico que es para los Bears tener el balón en sus manos, de cualquier manera posible.
Cuando los Bears se enfrentaban a una 3ª y 1 al principio del partido, Fields se alineó en la escopeta. El ala cerrada Cole Kmet entró en movimiento, antes de alinearse bajo el centro. Los Lions probablemente esperaban un quarterback sneak con Kmet, ya que los ataques han utilizado este tipo de diseño recientemente para convertir situaciones de yardas cortas con un jugador más grande, y evitar exponer a su quarterback al contacto.
Sin embargo, los Bears tenían otra idea:
En lugar del sneak, Kmet toma el snap, pivota hacia atrás y lanza a Fields, que tiene un convoy de bloqueadores delante de él. El QB evita a un defensa en el backfield, y corta campo arriba para el primer down.
¿Cómo terminó la posesión? Con Fields encontrando a Kmet para el primer touchdown del partido:
Fields mostró su atletismo un poco más tarde en el cuarto, en este dinámico scramble para una gran ganancia:
Los Bears ya han sido eliminados de los playoffs, pero con el desarrollo de Fields esta temporada, una selección que probablemente estará entre las cinco primeras del Draft de la NFL de 2023, y la previsión de que Chicago tenga el mayor espacio disponible en la NFL la próxima temporada, parece que se avecinan días mejores para los Bears.
Especialmente si Fields tiene el balón en sus manos.
